Mi Tía es Hipócrita?

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6/3/20232 min read

Voy a la universidad y vivo en un departamento mediano junto a mi familia.

Recientemente, he empezado a salir con un chico encantador, con un gran sentido del humor y muy caballeroso. Además, se lleva bien con mi madre y mis sobrinos. Compartimos varias metas en común, incluyendo la idea de formar una familia en el futuro a través de la adopción, ya sea juntos o individualmente. Me agrada mucho y considero que es un buen hombre.

El problema surge cuando mi tía se molesta cada vez que él viene a visitarme, ya sea para recogerme o cuando estoy enferma. En realidad, le molesta que alguien venga a verme a mí o a mi madre. Ella muestra gestos de desprecio y apenas le devuelve el saludo, lo cual me enfurece profundamente. Creo que, al menos por un mínimo de decencia humana, debería mostrar buenos modales.

Decidí enfrentarla y me respondió que solo está "preocupada" por mí, ya que soy una mujer atractiva y eso atrae la atención de los hombres. Me instó a concentrarme en mis estudios y argumentó que, después de todo, era su casa, por lo que podía actuar como quisiera.

Le dije que era una hipócrita, pues si bien es cierto que el departamento es suyo, no lo obtuvo de la mejor manera. Durante mi infancia, mis padres se divorciaron y en la disputa por mi custodia, mi madre necesitaba una vivienda para demostrar que podía cuidarme. Si no lo lograba, terminaría bajo la custodia del estado. En ese momento, mi tía propuso comprar un departamento juntas para nosotras tres. Mi madre aceptó y con el dinero obtenido de la venta de su antiguo departamento, ella pagó el 90% del costo del nuevo apartamento. En cambio, mi tía solo pagó un 5% y el resto fue cubierto mediante un beneficio bancario de aquel momento.

Luego, con la ayuda de una prima, mi tía transfirió la propiedad a su nombre, excluyendo a mi madre. Mi madre, en estado de shock, simplemente decidió no luchar por cuatro paredes. En ese entonces, yo era muy pequeña y no pude hacer nada al respecto.

Después de eso, mi tía regaló a mi gato y me obligó a limpiar el piso de cerámica con un cepillo de dientes cuando tenía doce años, dejándome con las manos heridas y sangrando. También me ha comparado constantemente con mi hermana mayor, a quien autodenomina "su hija". Cada vez que limpio, insiste en que debería deshacerme de muchas de mis cosas para tener la habitación "más ordenada" (lo cual es ridículo, ya que estoy en la habitación más pequeña del departamento y además la comparto con mi madre).