Mi Familia y la Iglesia

la religion no es para todos

Jose M

7/4/20232 min read

Mi familia es cristiana, aunque no de manera radical. Todos creen en Dios, pero ninguno le teme ni asiste a la iglesia. Yo, por mi parte, no me considero ateo, sino agnóstico. Soy una persona que defiende sus ideales, pero también estoy dispuesto a cambiar si me equivoco. Sin embargo, mi familia defiende firmemente sus creencias y no está abierta a escuchar otras opiniones. A veces, son un poco bruscos al expresarse.

Recientemente, como muchos ya saben, se estrenó la película de Five Nights at Freddy's, una franquicia de la cual soy gran fan. Sin embargo, mi madre, como buena religiosa, dice que es obra del diablo. Afortunadamente, mi hermana me dijo que me regalaría las entradas para ir al cine a verla. Debo destacar que vivo en un lugar muy pequeño donde no hay centros comerciales y además soy menor de edad.

Sin embargo, mi madre me dijo que, para poder ir a verla, debo ir a la iglesia. Le expliqué que no debería tener que hacer nada a cambio de un regalo, ya que es un gesto de generosidad. Pero insistió en que debía asistir. Yo no acepté ningún trato, ya que detesto ir a la iglesia y no considero que deba hacer algo para recibir mi regalo de cumpleaños.

Hoy, mi madre me comunicó que íbamos a ir a la iglesia. Le expresé que no quería ir, ya que en esa iglesia son muy estridentes: tienen al menos ocho altavoces enormes y además gritan durante el servicio. Por eso no me gusta. Sin embargo, ella me está obligando. Le dije que así como no creo tanto en Dios, tampoco creo en Satanás. Pero ella insiste en que el diablo me está controlando. En realidad, solo estoy expresando mis opiniones y estableciendo límites. Tengo casi 17 años (los cumplo este año) y soy consciente de mis decisiones. Sin embargo, ella me compara con mi hermano, diciendo que él cree en Dios aunque no asista a la iglesia. Pero mi hermano es todo menos cristiano.

Ya no sé qué excusa darle para que deje de insistir. Ella menciona que cuando era pequeña, me gustaba ir a la iglesia. Pero en realidad, me obligaba a ir y me adoctrinaba. Me hacía sentir miedo por las consecuencias que enfrentaría si no asistía, cuando apenas tenía seis años.

No sé qué más hacer para que mi madre deje de obligarme a ir y respete, al menos en cierta medida, mis decisiones.